jueves, 4 de diciembre de 2008

RECETA BUDISTA

RECETA DE UN FARMACO ENCONTRADO EN UN MONASTERIO BUDISTA ENTRE LAS MONTAÑAS DEL TIBET

Los habitantes del Tíbet, hace más de cuatro mil años descubrieron una milagrosa medicina, la cual se está usando en el mundo occidental, especialmente por aquellos que tienen más confianza en la medicina casera (natural) que en la química.

PREPARACIÓN.- Se meten en un tarro de cristal 350 gramos de ajo triturado junto con ¼ de litro de aguardiente.

El tarro se cierra herméticamente y se mete en el frigorífico durante 10 días. Al cabo de este tiempo se filtra con un colador fino de gasa. Se mete de nuevo en el tarro y se mete de nuevo en el frigorífico durante otros 2 días. Pasados éstos, el fármaco ya esta preparado para empezar a tomarlo de la siguiente forma:

Se continuará tomando 25 gotas tres veces al día hasta terminar el preparado. La terapia no se puede repetir antes de 5 años.

Indicaciones.- Este preparado de extracto de ajo, limpia el organismo de las grasas y lo libera de los cálculos depositados.
Mejora el metabolismo, y en consecuencia, todos los vasos sanguíneos se hacen elásticos. Disminuye el peso corporal llevándolo a su situación normal, deshace los coágulos de sangre, cura el diafragma y el miocardio enfermo.
Cura la arteriosclerosis, la iscemia, la sinusitis, la hipertensión, las enfermedades bronco-pulmonares; hace desaparecer por completo el dolor de cabeza. Cura la trombosis del cerebro, la artritis, la artrosis y el reumatismo.
Cura la gastritis, las ulceras de estomago y las hemorroides, absorbe Toto tipo de tumores internos y externos, cura los disturbios de la vista y el oído. Todo el organismo se recupera.

Receta conseguida por Juan Carlos Gil



Personalmente no he probado esta medicina y me gustaría escuchar la experiencia de alguien que desee prepararla y tomarla. Esto es una información y no una receta personal

1 comentario:

Marco Antonio Garcia Hernández dijo...

Se me olvidó comentar que a principios de año empecé con la receta.Empecé el día 1 de enero y terminé en mayo con todo el frasco.
Dos cosas importantes que noté con ella es mucha mas vitalidad y el increíble olor a ajo que tenía por toda la casa. Desde luego a parte de ese olor, merece la pena, eso si, ni se os ocurra tomar las gotas "a palo seco", con agua o zumo, a no ser que queráis estar solos sin que nadie se acerque a vuestro alrededor, aparte de que como os metáis 25 gotas de esta poción en la boca no encontráis la lengua en su sitio.
Ésta es mi experiencia, si alguien más que lo ha probado os invito a compartirlo con nosotros.
Es posible que dentro de unos años, cuando no me acuerde de ese olor a ajo vuelva a hacerla.
Un saludo.